06 marzo 2012

    Miles de elecciones; millones de pasos, ¿dónde me dejé el mapa? ¿Quién seré cuando no te mire a los ojos, cuando dejes de conocerme, cuando no me conozca yo? Querría hacer unas cuantas promesas, pero procuré olvidarme de las palabras vacías. Olor a dulce podedumbre, a cenizas de autodestrucción,  a dolor, viciado de tanto usarlo. Mi cordura empieza a sonar forzada, me despojaré de ella en cuanto amanezca una vida nueva. Si se me agarrota la espalda, muérdela y dejará de dolerme.

1 comentario:

  1. Es importante apuntar o recordar que es lo que se quería ser desde siempre, seguro que hay algo que desde siempre se ha querido ser o hacer. Puede que haya que pensar una rato pero al final siempre aparece, esa es nuestra esencia. Lo que somos en realidad son nuestros anhelos. Una vez delimitado el objetivo hay que desprenderse de lo supérfluo e ir a por ello. De ese modo las elecciones se limitan al color de los zapatos o si llevar pantalón largo o corto.

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